No sé qué es lo que me repugna más si la mentira o la verdad a medias. Puede que la infamia. Hace unos días estuve en la presentación del último libro de Ángel Viñas “la soledad de la República”, un libro que el propio Ángel comentó en su presentación escrito por y para contribuir a la dignidad de la República, tan denostada en nuestros días por esa campaña lanzada por la cavernícola derecha española, básicamente mediática, que mantiene la insostenible tesis de que II República y Guerra Civil son dos elementos inseparables, como las dos partes de un mismo todo. Tal falacia, alimentada por historicidas[1] y revisionistas sin escrúpulos está calando en cierta medida entre considerables sectores del consumo cultural de hipermercados, donde aparecen sus pseudo teorías en publicaciones con vocación de best-seller que están teniendo un cierto éxito. Es como si el apellido BASURA hubiera traspasado las fronteras del periodismo televisivo para instalarse en otros campos considerados serios, como la política o la historia. No deja de ser sorprendente que el proceso de extensión de la basura se encuentre capitaneándolo la derecha española en sus múltiples formas (política, sociológica, mediática, etc.) deslegitimando todo aquello que le molesta sea del presente o del pasado.. Y como muestra valgan unas líneas aparecidas en una web infame comentandoel asesinato del Alcalde de Fago por parte de un antiguo candidato presentado en las filas del PSOE y el comportamiento de TVE:
“Invitación a café en Fago[2]
¿Hace falta explicar lo obvio, lo que saben todos de por qué se empieza a eliminar físicamente otra vez a la derecha? La derecha se está ganando de nuevo muchas enemistades, y todo lo que pueda pasar tiene un motivo, porque hay que comprender, siquiera parcialmente, las razones de quienes desean terminar rápidamente con el problema. Como en los viejos tiempos. Un burgomaestre democráticamente elegido del PP. Un hacendado que se arrima al PSOE. El del PP que termina despanzurrado en una era, con una escopeta de postas. Lo normal.
Lo han invitado a café antes y también después de que el órgano de la bienpensancia oficial seocupara con toda la fanfarria estalinista habitual de su caso, a pesar de que el diminuto municipio que regía salga apenas en los mapas y no hubiese motivo imaginable para informar de nada. ¿Casualidad? Debe ser del mismo tipo que las del 11-M”.
Luego estas cosas se incorporaran a la historia como fuentes históricas
¡¡SIN COMENTARIOS!!
[1] Traducción personal: los presuntos historiadores que pretenden asesinar la verdad histórica elevando a la categoría de fuentes lo que no es sino anécdotas o elementos marginales
[2] Autor del desaguisado José Antonio Martínez Abarca
“Invitación a café en Fago[2]
¿Hace falta explicar lo obvio, lo que saben todos de por qué se empieza a eliminar físicamente otra vez a la derecha? La derecha se está ganando de nuevo muchas enemistades, y todo lo que pueda pasar tiene un motivo, porque hay que comprender, siquiera parcialmente, las razones de quienes desean terminar rápidamente con el problema. Como en los viejos tiempos. Un burgomaestre democráticamente elegido del PP. Un hacendado que se arrima al PSOE. El del PP que termina despanzurrado en una era, con una escopeta de postas. Lo normal.
Lo han invitado a café antes y también después de que el órgano de la bienpensancia oficial seocupara con toda la fanfarria estalinista habitual de su caso, a pesar de que el diminuto municipio que regía salga apenas en los mapas y no hubiese motivo imaginable para informar de nada. ¿Casualidad? Debe ser del mismo tipo que las del 11-M”.
Luego estas cosas se incorporaran a la historia como fuentes históricas
¡¡SIN COMENTARIOS!!
[1] Traducción personal: los presuntos historiadores que pretenden asesinar la verdad histórica elevando a la categoría de fuentes lo que no es sino anécdotas o elementos marginales
[2] Autor del desaguisado José Antonio Martínez Abarca
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